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Derechazo de Fortes al segundo de su lote en la Corrida Picassiana del 17 de agosto.
El mal juego de los toros marca una feria taurina en Málaga con escaso bagaje artístico

El mal juego de los toros marca una feria taurina en Málaga con escaso bagaje artístico

Fortes, Cayetano, Ureña y Talavante firman las mejores actuaciones de un abono con un Roca Rey que impactó y un Morante para olvidar

Antonio M. Romero

Lunes, 22 de agosto 2016, 00:19

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La Malagueta cerró ayer la temporada taurina con el último festejo de la feria de agosto. Un ciclo de ocho espectáculos que ha estado marcado por el mal juego de los toros salvo contadas excepciones y sin que haya salido un animal de bandera y donde el bagaje artístico, comparado con años precedentes, ha sido escaso. Fortes, Cayetano, Ureña y Talavante han firmado las mejores actuaciones durante un abono donde impactó el valor y la firmeza de Roca Rey y donde la actuación de Morante, eje del serial con dos tardes, ha sido pésima y para olvidar.

De los ocho encierros estuvieron bien presentadas la novillada de Manuel Blázquez y las corridas de Partido de Resina, Santiago Domecq, Victoriano del Río y Fermín Bohórquez; las de Torrealta y Garcigrande fueron desiguales en hechuras; y estuvo muy justita la de Núñez del Cuvillo. En cuanto a juego, se dejaron un sobrero aparatoso y de 640 kilos de El Torreón, uno manejable de Santiago Domecq, tres de Torrealta el lote de Joselito Adame y el último de Fortes, los dos de Cayetano y el segundo de Ponce en la de Victoriano del Río. El resto, mansos y descastados.

Los números dicen que el triunfador numérico es el mexicano Adame con dos orejas, pero si se analiza la calidad de las faenas ahí el podio está copado por cuatro toreros que han rayado a un gran nivel en el coso del Paseo de Reding. Fortes firmó el miércoles de feria la que quizás sea su mejor actuación en La Malagueta como matador de toros con un trasteo de quilates, de regusto, temple y mucha torería en el que se le vio muy firme y asentado. Muy entonado en actitud y en aptitud estuvo Cayetano ante sus dos toros, especialmente, en el segundo, donde lució al animal y cuajó una faena con temple y ligazón; lástima que Jocundo se acabara tan pronto y que el diestro madrileño pinchara con los aceros.

Buen cartel de presentación dejó en Málaga Paco Ureña con un trasteo de altos vuelos en el que hubo gusto, naturalidad, temple y mano baja. La madurez de Alejandro Talavante quedó patente en sendas faenas de distinto corte donde demostró su torería y la pureza de su toreo; dibujó unos naturales prodigiosos.

Aunque lidió un sólo toro porque fue cogido, el nombre que más ha impactado enMálaga ha sido Andrés Roca Rey. El peruano demostró valor y raza en una actuación épica en la que salió a matar a su toro después de un duro golpe en el abdomen y un fuerte traumatismo. La afición malagueña se quedó con ganas de disfrutar más de un joven espada en progresión que, de seguir en esa línea, está llamado a hacer cosas importantes en la fiesta nacional.

Roca Rey ha sido uno de los tres profesionales que han pasado por el hule de la enfermería de la plaza. Los otros son el novillero Leo Valadez con una cornada en el muslo y el subalterno Jesús González El Suso.

Del resto, destacar la profesionalidad y maestría de Ponce, la buena dimensión de Fernando Robleño o las ganas de Javier Jiménez, a quien le devolvieron un toro al corral al no poder matarlo. El resto de matadores se estrellaron contra el mal juego de los toros o con su propia desidia. Es el caso de Morante a quien le devolvieron un toro a los corrales en su primer festejo tras inhibirse de intentar matar al burel y a otro, en su segunda tarde, lo masacró en el caballo. Se llevó dos broncas monumentales del público.

Entre los novilleros Antonio Santana estuvo entonado y dio una buena dimensión Francisco Morales en su debut con caballos. Raza de Lavado, predisposición de Márquez y detalles de su buen concepto del toreo de Andy Younes. Valadez quedó inédito por su cogida. Se cerró el ciclo con los rejones, donde destacó Ventura, quien rayó a un gran nivel, muy por encima de Hermoso y Manzanares.

En cuanto al público ha habido buenas entradas todos los días aunque sorprendió que en la corrida del sábado, con un cartel estrella, la plaza no se llenara. Un coso cuya gestión saldrá a concurso en los próximos meses y se habla de posibles novias.

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