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Los juzgados de lo Mercantil de Málaga permanecen saturados por la cantidad de procedimientos abiertos y la falta de personal. :: sur
Los concursos de acreedores caen un 40% en Málaga por la reactivación económica

Los concursos de acreedores caen un 40% en Málaga por la reactivación económica

Casi 70 empresas de la provincia se declararon insolventes en 2016, el mejor dato de la última década pese a la saturación de los juzgados de lo Mercantil

ALBERTO GÓMEZ* En Twitter: @Agalmendres

Lunes, 20 de febrero 2017, 18:30

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MÁLAGA. El número de empresas malagueñas que se declararon en concurso de acreedores cayó un 40 por ciento en 2016 respecto al año anterior. El Instituto Nacional de Estadística (INE) revela que 69 empresas entraron en suspensión de pagos el ejercicio pasado, un dato que baja de las setenta sociedades por primera vez desde 2007. La leve recuperación económica de los dos últimos años, la mejora de las perspectivas empresariales y la reapertura de la financiación bancaria han propiciado que el número de compañías que acceden a un concurso voluntario o necesario disminuya de forma progresiva hasta alcanzar niveles anteriores a la crisis. En 2012, las empresas malagueñas que se declararon en situación de insolvencia ascendieron a 196.

Entre las 69 empresas malagueñas declaradas insolventes el año pasado, la mayoría pertenecían al comercio y la construcción, aunque también entraron en concursos de acreedores, como casos aislados, sociedades relacionadas con actividades administrativas, científicas inmobiliarias, transporte y hostelería. El descenso es superior a la media española, que se situó en un 17,3 por ciento. En concreto, el número de sociedades que accedió a estos concursos en todo el país ascendió a 4.080.

A nivel nacional, del total de concursos, 1.217 fueron voluntarios (un 10,2 por ciento menos que un año antes) y 92 fueron declarados necesarios (un 15,6 por ciento menos). Por clase de procedimiento, los ordinarios cayeron un 5,1 por ciento y los abreviados, un 11,4 por ciento. El 85,8 por ciento de los deudores concursados en 2016 fueron empresas (personas físicas con actividad económica y personas jurídicas). Los concursos se redujeron en todas las actividades económicas respecto a 2015: en agricultura, ganadería y pesca, un 44,3 por ciento; en construcción, un 28,3 por ciento, y en industria y energía, un 22,7 por ciento.

Viabilidad

Daniel Pastor, abogado especializado y presidente de la cátedra de Viabilidad Empresarial en la Universidad de Málaga, también achaca estos descensos «al mal resultado del procedimiento concursal» que comenzó a ponerse en marcha en 2005: «De cada cien empresas se reflota una o una y media porque el 95 por ciento va a liquidación y el cinco por ciento, a convenios que no siempre salen adelante». Pastor explica que la carga de los juzgados y la prolongación de los procedimientos resultan clave para entender «el fracaso» de estos concursos. «Al final se beneficia a la banca, la Agencia Tributaria y la Seguridad Social frente a otros acreedores», sostiene este abogado, quien celebra que la nueva normativa europea permita que se alcancen acuerdos entre la mayoría de acreedores siempre que no se perjudique a terceros.

La ley de segunda oportunidad, aplicada en otros países europeos desde hace años y por la que los jueces pueden eximir del pago de las deudas a las empresas que demuestren que se han declarado en concurso de acreedores en tiempo y forma, de buena fe y con calificación de no culpable, es otra de las medidas que defiende el sector. Uno de los principales temores de las sociedades es la asignación de su administrador concursal. Pastor también considera «muy positivo» que, tras las próximas reformas normativas, se escuche a los empresarios y se solicite cualificación por parte de los administradores mediante un examen de especialización.

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