Borrar

El Banco de España evita entrar en detalles sobre las operaciones del 'caso Bankia'

En la documentación remitida al juez reitera varias veces sus conclusiones sobre el uso de provisiones para tapar ‘agujeros’ y elimina argumentos que superen lo técnico

José Antonio Bravo

Viernes, 27 de noviembre 2015, 21:48

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

El Banco de España parece haber tenido muy presente el dicho marinero de por la boca muere el pez al responder al juez de la Audiencia Nacional Fernando Andreu, instructor del caso Bankia. Por eso, ha optado por la reiteración al mandarle «toda» la documentación que éste le urgió a principios de semana, y que fue la base que tomó para elaborar el controvertido dictamen que permitía a la citada entidad financiera aplicar las provisiones para diluir su agujero contable multimillonario.

Conforme a ello, Bankia sí disponía de un colchón suficiente para afrontar los deterioros de activos que tenía a finales de 2011 (2.083 millones de euros). Y ello gracias a las «provisiones genéricas» que, según el supervisor, pueden usarse sin mayor detalle para cubrir posteriormente dichas necesidades. Así, frente al peor de los escenarios presentado por los peritos judiciales, la entidad tendría un saldo positivo de 103 millones.

No ocurre lo mismo, sin embargo, con su matriz. El Banco Financiero y de Ahorros (BFA) seguiría sufriendo un desfase contable muy importante aún aplicando esas provisiones, aunque se reducirían un tercio sobre los casi 6.870 millones registrados a finales de 2011.

Pero en su informe, el Banco de España no va más allá. Se limita a recoger «el criterio técnico sobre la interpretación de la normativa a la que deben atenerse las entidades de crédito en la formulación de sus estados contables». Elude así entre otras cosas, porque no se le había preguntado- pronunciarse sobre otras cuestiones referentes a la polémica gestión de Rodrigo Rato al frente de Bankia (2010-2012) como, por ejemplo, «la pésima calidad del seguimiento del riesgo de crédito, los múltiples «errores contables» detectados o las «discrepancias» llamativas que «prueban retrasos en el reconocimiento de los deterioros», sobre todo en los créditos al sector inmobiliario.

De hecho, en los 53 folios de documentación remitidos al juzgado incluye cuatro informes de sendos departamentos distintos del Banco de España que dicen básicamente lo mismo. Incluso cuando la División de Normativa Contable se salió un poco del guión para extenderse en explicaciones no estrictamente técnicas, fue reconvenida.

Curiosa omisión

Por eso, en la versión final del informe de cuatro páginas que el supervisor bancario envió primero se omitió una frase donde se justificaba en «cuestiones prácticas» el uso de las provisiones. En concreto, se afirmaba que era «el modo de hacer factible un seguimiento adecuado del riesgo de crédito a partir de la fecha de la combinación».

Pese a la aparente obsesión del Banco de España por ceñir su informe a lo técnico, evitó consultar al Instituto de Contabilidad y Auditoría de Cuentas (ICAC), la máxima autoridad en esta materia. Y_lo hizo alegando que no había «interés general» en este caso, pese a saber que su tesis contradecía una de las principales conclusiones de los dos peritos judiciales, a la sazón inspectores del propio supervisor.

Precisamente ambos expertos, Antonio Busquets y Víctor Sánchez, han sido emplazados por el instructor para que tengan oportunidad de rebatir las conclusiones de sus jefes. En realidad, quiere que puedan hacer lo mismo con todos los informes de expertos que han presentado las defensas:_desde el que hizo el catedrático de Economía Financiera y Contabilidad Leandro Cañibano para Bankia, hasta los últimos ratificados por otros tres catedráticos contratados "ex profeso" por Rato.

El dictamen del Banco de España se produjo curiosamente a instancias del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB), que como máximo accionista de Bankia está personado en calidad de responsable civil. Según ha explicado ahora al juez, en febrero pidió al supervisor bancario su análisis e interpretación específica de la normativa contable para sustentar sus alegaciones frente al informe de los peritos.

Consideraba que era la más adecuada estrategia procesal para la defensa del interés público, que el FROB afirma representar -de sus arcas, nutridas con dinero del Estado, salieron los 24.424 millones de euros que costó rescatar al banco- frente a los cientos de perjudicados por la salida a Bolsa de Bankia personados en la Audiencia. Pero prefirió no trasladar entonces ese documento al juzgado, y solo hacer referencia indirecta al mismo, para mantener la menor visibilidad o injerencia del Banco de España en este proceso. Su objetivo se frustró tiempo después porque la defensa de Rato sí insistió en que se conocieran esas conclusiones del supervisor.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios