Borrar
Los componentes del Waterpolo Málaga, ayer en la piscina de Inacua.
El Waterpolo Málaga ya piensa en futuro

El Waterpolo Málaga ya piensa en futuro

El presidente del club, Alfonso Wucherpfennig, explica los cambios que el equipo tendrá que afrontar en Primera

MARINA RIVAS

Martes, 25 de abril 2017, 00:53

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

Todavía quedan restos de la resaca postcelebración en los jugadores del Waterpolo Málaga. Y no es para menos. El equipo absoluto del club de la capital hizo historia el pasado sábado al conseguir ascender a Primera División (la segunda categoría nacional). Un dato que lo mete de lleno en la historia de este deporte en la provincia, al ser esta la posición más alta obtenida por un equipo de waterpolo malagueño.

Llevaban ya tres años quedándose a las puertas, intentando obtener el pase a Primera y, ahora que lo han obtenido, les toca ponerse a pensar en lo que tienen por delante. Crece el presupuesto y, por lo tanto, crecen los gastos. El presidente del Waterpolo Málaga y también nadador del conjunto explica que, al ascender, el club podrá tener derecho a la subvención económica que ofrece la Diputación para los equipos de primera y segunda categoría nacional de su deporte. Sería una contribución que rondaría los 4.000 euros y que se sumaría a las cantidades anuales que abonan sus principales patrocinadores, Unicaja Fundación y Kia Iberocar, además de la subvención del Ayuntamiento. Además de esto, las ayudas económicas por parte de la Junta también podrían dar un respiro.

Sin embargo, no todos los datos son buenos. El subir de nivel también hace que se acrecienten los costes en el waterpolo. Principalmente, por el coste obligatorio del derecho de participación en la Liga, el abono de las dos licencias necesarias (la territorial andaluza y la española), por los gastos en arbitraje (que podrían ascender de los alrededor de 7.000 euros actuales a unos 10.000 anuales) y también por los desplazamientos.

Viendo las cifras, cuesta pensar que pueda haber hueco para remodelaciones de la plantilla cara a una división más exigente, aunque Wucherpfennig se muestra tranquilo. Y es que el pilar de este club es su cantera. Trece son los jugadores que actualmente componen la primera plantilla, quizá diecisiete si se incluye a los juveniles que han sido convocados en ocasiones puntuales. Y de entre ellos, sólo tres son externos: Serban Muresan, que jugaba en la liga rumana y vino a estudiar a la Universidad; Patricio Luppi, procedente de Argentina pero en las filas del Málaga desde 2009, y Juan Luis Arostegui, que ya jugó anteriormente con el equipo y la pasada campaña compitió en Primera con el Caballa de Ceuta.

Rivales catalanes y madrileños

«Nuestra filosofía es la de un club de cantera. Si con el presupuesto que manejemos nos da para cubrir los básicos del club, igual hacemos algún refuerzo, pero ahora mismo los fichajes no son nuestra prioridad», se sincera Wucherpfennig, que prefiere optar por mejorar las condiciones del equipo. La próxima temporada le tocará batirse a rivales un escalón por encima de lo que están acostumbrados, con un claro predominio de los conjuntos madrileños y catalanes en la competición.

Los más fuertes, como es costumbre en waterpolo, serán los catalanes. Sobre ellos, el presidente valora: «Tienen una gran cultura por este deporte, poseen numerosos clubes y buenas instalaciones en las que, además, algunos se entrenan entre ellos para prepararse mejor cara a la competición». Esta es la razón que ha motivado al entrenador del equipo malagueño, el húngaro Peter Kubicsko, a buscar la posibilidad de entrenar con algún equipo catalán en la pretemporada. El técnico ya ha empezado a plantear el calendario, en el que ya figuran dobles sesiones en las primeras semanas de agosto, el mes previo al inicio de la Liga. Sin embargo, Kubicsko asegura que el principal cambio será la motivación con la que el equipo deberá afrontar este nuevo y exigente camino.

Publicidad

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios