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Woods saluda a Jiménez, ayer en el campo de prácticas de Augusta.
El sueño de la chaqueta verde no tiene edad

El sueño de la chaqueta verde no tiene edad

El malagueño Miguel Ángel Jiménez aspira, a los 51 años, a lograr su primer 'grande' en el Masters de Augusta

Enrique Miranda

Jueves, 9 de abril 2015, 00:32

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Pocos torneos de golf en el mundo tienen el atractivo del Masters de Augusta. Sobre el espectacular recorrido del Augusta National, en Georgia (un club tan carismático como elitista), los mejores profesionales pelean por la ansiada chaqueta verde, prenda que identificaba a los miembros del club y que recibe el ganador del campeonato. La tradición señala que el último ganador le impone la prenda a su sucesor, aunque curiosamente el golfista no se queda con ella, sino que la custodia durante un año para devolvérsela luego al club.

Entre los 98 profesionales que empezarán hoy la carrera hacia la chaqueta verde está el malagueño Miguel Ángel Jiménez, en la que será su decimosexta participación en el prestigioso torneo. El de Churriana, pese a no ser uno de los claros favoritos al título, será uno de los jugadores más seguidos por el público norteamericano. Su popular melena pelirroja, sus inseparables puros y su fuerte personalidad -en los entrenamientos previos ya hizo algunas bromas en el campo, para regocijo de los espectadores- lo convierten en un personaje atractivo. Para el resto de participantes, el malagueño es un veterano muy respetado, que en cualquier momento puede dar un golpe sobre la mesa. Nadie se acuerda de sus 51 años y sí de que el año pasado terminó cuarto y llegó a la última jornada con opciones de victoria. Jiménez, desde luego, va a Augusta a ganar: «¿Por qué no? Yo estoy jugando bien. No importa la edad que tengas, solo se trata de jugar al golf y yo sé cómo hacerlo. Espero llegar al final de la semana entre los mejores», comentó en las declaraciones previas al torneo.

Jiménez, deportista que se sale de cualquier estereotipo, ha demostrado que es capaz de competir al máximo nivel pese a superar los 50. Tendrá que luchar contra la historia, ya que ningún golfista mayor de 50 años ha ganado un 'grande', aunque el de Churriana rompió todos los registros de edad al vencer con 50 años y 133 días en el Abierto de España (es el jugador de más edad en lograr una victoria en el Circuito Europeo). El 'Pisha' ya sabe lo que es liderar el torneo en varias jornadas y en cuatro ocasiones ha terminado entre los diez primeros. Su mejor clasificación en el campeonato -en el que solo dos españoles han conseguido el triunfo, Olazábal y Ballesteros- fue el cuarto puesto del año pasado. Empezará a jugar hoy a las 9.13 horas (15. 13, hora española), junto al británico Lee Westwood y al indio Anirban Lahiri.

Dura competencia

Jiménez no oculta que su sueño en esta recta final de su carrera sería lograr un gran torneo y Augusta es una buena oportunidad, aunque la competencia sea muy dura: «Llevo 20 victorias en el Tour Europeo y lo que me gustaría es rematar con un 'major'. No sé lo que significa ganar un grande y me encantaría experimentar esa sensación», dijo el año pasado tras quedarse a las puertas del triunfo.

La competencia es tan dura como que en Augusta están los 54 de los 60 mejores jugadores de la clasificación mundial. Los grandes favoritos son el norirlandés Rory McIlroy, número uno del mundo y que solo le falta el torneo de Augusta para completar el 'Grand Slam', el estadounidense Bubba Watson, defensor del título o Phil Mickelson, ganador tres veces en Augusta, aunque el abanico de candidatos es mucho más amplio.

El año pasado, el cuarto puesto le terminó dejando a Jiménez un regusto agridulce. Era un gran resultado, el mejor de su carrera en Augusta, pero quedarse tan cerca de la victoria le dejó con la miel en los labios: «Nunca me he sentido tan cerca de ganar un grande», dijo. A partir de hoy tendrá una nueva ocasión para dar la sorpresa. Como suele ocurrir en sus torneos, el malagueño va de menos a más, por lo que su principal objetivo será pasar el corte del viernes y competir el fin de semana desde una buena posición. Después ya se verá. La chaqueta verde espera dueño.

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