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Orellana celebra el gol al Real Madrid, el segundo de su equipo. :: M. BRUQUE. EFE
El líder se quema en Mestalla

El líder se quema en Mestalla

Los blancos pierden uno de sus comodines y dejan que el Barça y el Sevilla se acerquen a uno y tres puntos, respectivamente

IGNACIO TYLKO

Jueves, 23 de febrero 2017, 01:03

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Espoleado por el 'efecto Voro' y por dos tempraneros goles de Zaza y Orellana, dos recién llegados que han mejorado las prestaciones ofensivas de su equipo, el Valencia sometió al Real Madrid y le dio vida a la Liga, ya que deja al Barça a sólo un punto y al Sevilla a tres de los merengues, todavía con la 'bola extra' pendiente de Balaídos. Siempre a remolque, con dificultades atrás porque Varane vivió una de sus peores tardes y frente a un adversario en alza, el líder volvió a sufrir un un severo traspié en un estadio que dejó en 22 el récord de victorias consecutivas de Carlo Ancelotti y sentenció a Rafa Benítez. La derrota deja como señalado también al colombiano James Rodríguez, titular pero sin ninguna influencia positiva en el partido. Y sorprendió que, con el marcador en contra, Zidane no recurriera a Morata.

«Nos espera un partido complicado frente a un rival que ha mejorado mucho», advirtió 'Zizou' el martes. Presagiaba el técnico francés que era un partido trampa para su Real Madrid en territorio enemigo. Un choque extraño en día laborable que coincidía con jornada de Champions y frente a un adversario revitalizado gracias al aplomo en el banquillo de Voro, a los buenos resultados en las últimas semanas y a la llegada en invierno de jugadores de jerarquía. El exchileno del Celta posee técnica, desborde, visión de juego, mientras que el singular ariete italiano ha encandilado a una hinchada muy exigente en cuestión de días. No veía puerta desde primeros de mayo con la Juventus, pero marcó frente al Athletic y repitió ante el Real Madrid.

Firmó Zaza un golazo extraordinario a los cinco minutos. Recibió un buen centro de Munir, controló y a la media vuelta la clavó por la escuadra. Varane estuvo muy blando, sin encimarle o molestarle con el cuerpo. El central francés erró también en el segundo gol. Salió de su zona de confort, perdió el balón en campo rival y anticipó un contragolpe letal. No definió bien en el disparo final Orellana, pero sorprendió a Keylor Navas, quien sigue alimentando el debate de la portería. Le batió con el Celta y ahora también con los de Mestalla.

El calendario le jugó una mala pasada allíder. Y por varias razones. Le marcaron dos jugadores que no estaban en diciembr. Antes de las navidades, los locales eran un polvorín, con Prandelli incapaz de dar con la tecla, Mangala, Garay, Enzo Pérez y Nani, lesionados, la afición en contra y el fantasma del descenso sobrevolando. Y el equipo de Zidane seguía con su enorme racha de imbatibilidad. Ahora, sin embargo, el Valencia disfruta de su mejor versión del curso. Ha ganado en autoestima y frente al Real Madrid sumó su tercer partido sin perder, récord en esta temporada. Y el Real Madrid, en cambio, genera más dudas desde enero y muestra costuras.

James y Varane, señalados

Con la tranquilidad que dan los dos goles, el Valencia supo manejar bastante bien el primer tiempo e incluso en algunas fases le discutió la posesión de balón al contrario. Pero a un conjunto con todas sus estrellas sobre el campo, salvo Gareth Bale, que comenzó como suplente, al Madrid no se le puede dejar ni un metro. En los últimos compases del primer acto ya pudo incluso empatar. En el 44', gran centro de Marcelo y cabezazo soberbio de Cristiano, al que perdió de vista Mangala. Decimoquinto tanto del 'Balón de Oro' en Liga. E instantes después, un latigazo del portugués rozó el poste.

Durante la segunda mitad, Zidane retiró a James, prácticamente inédito, e introdujo a Bale, con grandes recuerdos de este escenario desde esa carrera antológica que señaló a Marc Bartra y le dio una Copa al Madrid. No ocurrían grandes cosas, más allá de un equilibrio fantástico de Parejo sobre la línea de fondo y un posible penalti de Mangala sobre Cristiano, hasta un minuto de locura. Zaza recibió otro regalo de Varane y cuando iba a rematar fue atropellado por Carvajal. Del posible penalti no señalado a una entrada desmedida de Mangala a Benzema que pudo ser roja en lugar de amarilla. Poco después, Ramos le pisó de forma absurda a Munir sobre la línea del área y el árbitro vasco, muy próximo, no indicó la pena máxima. La entrada de Lucas en lugar de Modric no mejoró al Madrid, sino todo lo contrario. Demasiados centros bombeados ante un Garay imperial. Segunda derrota del líder en esta Liga, tras la sufrida en el Sánchez Pizjuán.

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