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Vero Boquete.
«España es un país machista, no solo en el mundo del fútbol»
Entrevista

«España es un país machista, no solo en el mundo del fútbol»

«Los peores insultos venían de las mujeres», asegura la gallega que aspira a ser nombrada como la mejor jugadora de 2015

Lucía Santiago / Olga Martín (EFE)

Martes, 28 de abril 2015, 17:09

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La capitana de la selección española femenina de fútbol, Vero Boquete, dijo que encontró la "aceptación" que no tenía en España en su periplo por Rusia, Estados Unidos, Suecia y Alemania, donde construyó una carrera que ahora le permite no solo ser futbolista profesional sino una referencia mundial. "Fuera de España encontré la aceptación", subrayó Vero Boquete, una trotamundos que a los 17 años abandonó su Galicia natal para afrontar cotas mayores. A su estancia en el Transportes Alcaine y el Espanyol, le sucedieron éxitos en Rusia, Estados Unidos, Suecia y Alemania, donde en los próximos días se jugará la Bundesliga y la Liga de Campeones en dos 'finales' frente al Wolfsburgo y el Paris Saint-Germain, respectivamente.

De carácter rebelde y ambicioso, la capitana de la selección española, que este verano en Canadá comparecerá por vez primera en un Mundial absoluto, desafió desde los tres años a sus rivales y a los insultos procedentes del graderío. "Los peores", lamentó, "por parte de mujeres", "Quizás no veían bien que una niña fuera mejor que sus hijos", reflexionó.

Para vencer los estigmas sociales, Vero Boquete señala como solución la educación, aunque "la igualdad real entre hombres y mujeres", asegura, "tardará años en llegar". "España es un país machista, no solo en el mundo del fútbol", analizó tras recordar que en los Estados Unidos ser futbolista es la aspiración de muchas niñas que ven cómo sus ídolos protagonizan las campañas de publicidad de las principales marcas. Precisamente en el país norteamericano, donde regresó tras abandonar el Tyresö sueco para guiar a Portland Thorns hasta las eliminatorias por el título de campeón de la NWSL, las "jugadoras seleccionables tienen contratos federativos de unos 80.000 dólares anuales", además de primas por partidos jugados y por los resultados obtenidos en competiciones internacionales, explicó Boquete.

Es por ello que, por "respeto a las que lucharon antes y también por respeto al futuro", la santiaguesa apuntó hacia nuevas conquistas individuales -en 2014 figuró entre las diez candidatas al Balón de Oro de la FIFA- y colectivas que acerquen el fútbol español al nivel económico y deportivo de las grandes ligas europeas. "El Mundial de Canadá es la gran esperanza para el fútbol femenino", confesó. "Cuanto más largo sea el camino, más días de tele y más espacio en los periódicos, más gente va a saber que estamos jugando un Mundial y más niñas nos van a conocer. Al final es una cadena, y en el deporte lo que ayuda es el éxito", razonó.

A su carrera de triunfos en las principales ligas internacionales solo le faltan victorias relevantes con el combinado nacional, tras haber saboreado la gloria con las categorías inferiores y haber anotado el gol que guió al combinado dirigido por Ignacio Quereda hacia la Eurocopa de Suecia 2013, torneo que cambió los objetivos del combinado español.

"Lloré cuando Madrid no fue elegida sede olímpica porque es la única forma que tenemos de estar en unos Juegos. Estar entre las tres mejores europeas en un Mundial es prácticamente imposible para nosotras, pero siempre pienso más allá. Nuestro lema es 'soñar en grande' y ahora debemos pensar que tenemos una opción muy pequeñita de estar en Río 2016", agregó.

Para ello, el cuadro español deberá superar la fase de grupos, en la que se encontrará con los equipos de Costa Rica, Brasil y Corea del Sur, antes de citarse en los octavos de final con "un rival muy duro". "Pero si es europeo y ganas, estarás muy cerca de unos Juegos. Todo puede estar muy lejos o muy cerca", apuntó a dieciséis días de disputar en Berlín su segunda final de la Liga de Campeones.

Tras alcanzar la cima en una carrera marcada por las "carencias", Vero Boquete responsabiliza del éxito del deporte femenino "a la falta de repercusión y seguimiento". "Cuando no tienes ayudas ni patrocinadores, trabajas más porque te quieres reivindicar y eso te hace dar un plus", sentenció Vero Boquete.

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