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Berta Vias participa en ‘Un café cargado de lecturas’.
Berta Vias: «El lector busca algo más que el que está jugando a las maquinitas»

Berta Vias: «El lector busca algo más que el que está jugando a las maquinitas»

La autora de ‘Venían a buscarlo a él’ y ‘Yo soy El Otro’ se toma hoy un café con los lectores en un acto del Aula de Cultura de SUR y el Centro del 27

Regina Sotorrío

Lunes, 25 de abril 2016, 00:07

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Berta Vias tiene una habilidad que va más allá de su capacidad literaria: la intuición. Escribe sabiendo cómo es esa persona a la que ni siquiera conoce y, cuando finalmente lo hace, confirma lo que ella ya sabía. Le ha ocurrido en más de una ocasión, la última vez en Yo soy El Otro. El libro, Premio Torrente Ballester, cuenta la historia de José Sáez, un calco de El Cordobés que sin embargo no logró el éxito del famoso torero en los ruedos, es «la otra cara de una misma moneda». A partir de hechos reales, de escasas referencias biográficas y periodísticas, Berta Vias construye una novela con «mucho más de ficción de lo que puede parecer». Aquí, como en todos sus relatos, se toma sus licencias. En literatura se puede e incluso se debe: «El lector busca algo más que el que está jugando a las maquinitas. Quien lee, quien hace ese ejercicio de estar solo escuchando una voz que habla desde una página, quiere trascender la realidad o entenderla mejor».

De esto y más charlará hoy con los lectores en una nueva cita de Un café cargado de lecturas que organiza el Aula de Cultura de SUR y el Centro Cultural Generación del 27 (18.00 horas en Café de Bolsa).

Tímida declarada, los libros fueron su «escondite» en su adolescencia. Con los años ya no se escondía tras ellos, simplemente se refugiaba entre las páginas: «Soy una lectora compulsiva». En sus planes no entraba ponerse ella delante de un folio en blanco, pero a los 35 años se quedó en paro y aprovechó sus noches de insomnio para probar suerte desde ese otro lado de la literatura. «Y no me puedo quejar. Económicamente no es una maravilla, pero he recibido buenas críticas y dos premios, y eso para mí ha sido muy importante», declara la autora y también traductora.

El primer impulso, el chispazo de muchos de sus libros, está en un personaje real que luego ella transforma y adereza al gusto, pero siempre con «verosimilitud». Lo hizo en Los pozos de la nieve (2008) con miembros de su familia;en Venían a buscarlo a él (2010) creando un alter ego de Albert Camus; y lo vuelve a hacer en su último libro Yo soy El Otro (2015) con ese espejo de El Cordobés que era el diestro jiennense José Sáez. «Cuando termino una novela me asusto porque pienso que tal vez ha llegado el final, pero la idea surge de repente», explica. De hecho, ya tiene una rondándole en la cabeza y avanza que en esa nueva historia también habrá un personaje real, por primera vez una mujer.

Yo soy El Otro cuenta las desventuras de ese diestro joven de origen humilde con los apoderados, dispuestos siempre a sacar partido de su gran parecido físico con la figura taurina del momento; y sus peripecias con el propio Cordobés, una «sombra» constante en su carrera, hasta que decide dejarlo todo. «Por eso creo que el triunfo en realidad es de él, porque pudo hacer lo que El Cordobés no pudo hacer nunca: dejar de torear», reflexiona. El éxito, al final, «está en ser uno mismo y en la bondad».

Levantó al personaje desde la nada, a partir de una biografía minúscula que aparecía en El Cossío y tirando de crónicas taurinas y revistas especializadas. Cuando ya tenía claro a su protagonista y tras dos años de investigación, localizó al verdadero José, «un tipo estupendo» que sigue callándose muchas cosas para no hacer «daño a nadie». Al tratarle de cerca, descubrió que el auténtico no se diferenciaba demasiado de aquel hombre que ella se había imaginado sobre el papel. Ya saben, la intuición.

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