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Gusev, ayer durante la entrevista.
Vladimir Gusev: «Queremos romper desde Málaga los estereotipos sobre el arte ruso»

Vladimir Gusev: «Queremos romper desde Málaga los estereotipos sobre el arte ruso»

«Durante un año hemos preparado el proyecto, no hay ningún tipo de prisa en esta iniciativa», defiende el director del Museo Estatal Ruso de San Petersburgo

Antonio Javier López

Miércoles, 14 de enero 2015, 16:44

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Dirige el mayor museo del mundo dedicado al arte ruso, es Caballero de la Legión de Honor en Francia y ostenta otros reconocimientos concedidos por los gobiernos de Japón o Italia; pero Vladimir Gusev parece alejado de las rigideces del protocolo. Sin ir más lejos, este lunes era casi el único que no llevaba corbata en la presentación de las primeras exposiciones del Museo de San Petersburgo en Málaga.

¿Por qué España, por qué Málaga y por qué ahora?

Es difícil responder con una sola razón, casi imposible porque diferentes condiciones tienen que coincidir y hemos encontrado esta coincidencia aquí. Uno de los amigos del museo que nos apoya y ayuda nos comentó las posibilidades que tenía esta ciudad. Eso coincidió con que la Embajada de Rusia en España aconsejó a Málaga trabajar con nosotros y a nosotros trabajar con Málaga y por eso hace un año llegamos aquí por primera vez. Nos hemos asegurado de que aquí existen todas las posibilidades para llevar a cabo el proyecto. Desde el edificio, casi terminado, hasta un gran interés por la cultura. En cualquier hotel (abre un plano de Málaga) encuentras todos los lugares de interés cultural que hay en la ciudad. En Málaga entienden la importancia que tiene la cultura para el desarrollo del turismo y que el turismo cultural ayuda al desarrollo de la ciudad. Ellos y nosotros queríamos no hacer sólo una exposición, sino tener una relación continua. Durante un año hemos preparado el proyecto, no hay ningún tipo de prisa en esta iniciativa.

¿Se plantearon otras ubicaciones en la ciudad?

Al principio nos enseñaron fotografías de diferentes edificios, pero cuando llegamos a la ciudad comprendimos que no era necesario buscar más. Respecto a la logística por la localización de Tabacalera, es un problema que se puede resolver. El alcalde así lo cree y nosotros vamos a ofrecer proyectos atractivos e interesantes. En Rusia muchas veces las antiguas fábricas se convierten en centros culturales y son lugares donde es mucho más cómodo trabajar porque, por ejemplo, nuestro museo está en varios palacios que son muy hermosos, pero no puedes cambiarlos. Aquí sí podemos hacer algunos cambios, además hay bastante espacio para desarrollar nuestro museo virtual, basado en las nuevas tecnologías con proyecciones de cine y actividades culturales.

Durante la presentación ha alabado las bondades de la competencia con el Centro Pompidou Málaga, que se inaugurará casi a la vez que el museo ruso. ¿No teme que la sombra del proyecto galo sea demasiado alargada?

No, porque con este centro colaboramos desde hace mucho tiempo. En su día presentamos una exposición sobre Filonov en el Pompidou y en torno al arte del siglo XX solemos hacer intercambios de obras. Es importante coordinarnos para no molestarnos, pero la competencia saludable siempre nos ayuda. Simplemente hay que hacer proyectos interesantes y llamativos.

Un papel más activo

Las previsiones municipales calculan que por el museo ruso pasarán 150.000 visitantes durante su primer año, cien mil menos de lo estimado para el Pompidou. ¿Lo considera un dato realista?

Creo que es suficiente. No me importa tanto si en el Centro Pompidou van a tener más visitantes, porque a nosotros nos va animar a buscar proyectos más interesantes y estar más activos. El alcalde piensa que vamos a superar esa cantidad de visitantes, pero incluso con esa cifra y con el precio de la entrada a seis euros, que en la práctica mundial no es caro, podríamos cubrir la mayoría de los gastos que van a ocasionar este proyecto.

Se ha referido al potencial turístico del proyecto. La apertura del museo coincide con una situación delicada de la economía rusa, con una fuerte depreciación del rublo respecto al euro. ¿Cree que ese escenario puede pasar factura a la llegada de visitantes?

Creo que no, porque esta situación hace que en Rusia crezca mucho el turismo interior y nosotros tenemos muy en cuenta la diáspora rusa que vive y trabaja en esta zona. Hemos hablado ya con ellos y nos van a ayudar a desarrollar el proyecto, aunque el museo se dirige a todo el mundo, para el entendimiento de las culturas y de los países. Queremos romper desde Málaga los estereotipos sobre el arte ruso.

¿Ha pesado la presencia de esta comunidad rusa a la hora de decantarse por Málaga?

Fue una de las cuestiones importantes, porque también nos apoyan y nos estimularon bastante.

¿Confía en esa comunidad para lograr los 175.000 euros previstos en patrocinios privados para el museo durante su primer año?

Esas cifras vienen de la municipalidad, pero por ahora los patrocinadores del museo ruso mantienen sus aportaciones, a pesar de la situación económica. Además, no se trata sólo de dinero, sino de lograr contactos y alianzas para atraer visitas.

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