Las ‘superestrellas’ de Warhol se pasan al formato digital

Los cuadros de Marilyn Monroe, los billetes de dólar y las latas de sopa Campbells sólo fueron una parte del trabajo de Andy Warhol. Tanto o más tiempo dedicó el artista a sus películas, algunas como Empire, más de ocho horas con la imagen fija del Empire State Building de Nueva York, y unas cuantas algo más amenas, como Chelsea Girls, cine de serie B con un gusto por la exageración y la provocación sexual.

Rodada en su mayoría en cinta de 16 milímetros, el Museo de Arte Moderno de Nueva York (MoMA) y el The Andy Warhol Museum de Pittsburgh han anunciado que pasarán toda la obra cinematográfica del artista a formato digital. Contarán para ello con la compañía MPC, especializada en efectos especiales, y prevén que la tarea dure años, pues tendrán que digitalizar fotograma a fotograma 60 largometrajes, 4.000 vídeos y 279 screen test.

Estas últimas consistían en pruebas de unos dos minutos que Warhol tomaba de sus amigos o de desconocidos bajo la premisa de que todo el mundo, en principio, podía ser interesante. Algunas de ellas, como las de Lou Reed y Dennis Hopper, se vieron en el Guggenheim Bilbao desde finales de 2012.

El artista trabajó muchas veces sin guión previo y pensaba que sus adorables superestrellas jóvenes del underground neoyorquino como Edie Sedgwick, Joe Dallessandro, Viva, Candy Darling, Ultra Violet, Nico y Velvet Internacional eran suficientemente atractivas como para dedicarles largos minutos de película sin apenas narración.

En total, el conjunto cinematográfico de Warhol suma mil rollos de película además de los vídeos. Un trabajo ingente a la vez que necesario. El interés por la obra fílmica del artista está creciendo entre especialistas y aficionados, como prueba la alta demanda de estas obras en la biblioteca del MoMA, según han declarado sus responsables.

Además, el formato en 16 milímetros exige reproductores difíciles de encontrar y el estado de las cintas aconseja la digitalización para asegurar su futuro. Una vez termine el proceso, el cineasta Warhol estará fácilmente disponible para todos los públicos en alta resolución.

Los responsables de los museos involucrados han anunciado asimismo que en octubre estrenarán quince filmes que nunca han sido proyectados en público, proyecciones que se harán ya en formato digital.

Todos desnudos

Empire cumplió en julio 50 años y marcó el inicio de la trayectoria cinematográfica del artista. En su primera época, Warhol realizó una serie de películas experimentales inspiradas en las performances que empezaban a cobrar una gran relevancia el arte neoyorquino de aquellos años. En Sleep filmó al artista John Giorno durmiendo a través de 22 to

mas diferentes. El espectador de Eat observa cómo el también creador Robert Indiana se come unos champiñones. Más tarde, Warhol rodó filmes de un contenido sexual muy claro, aunque en ningún caso pornográfico, como Blow Job y Hand Job. Aunque no los mostrara del todo, solía filmar a los actores desnudos. Uno de ellos, Allen Midgette, le sugirió rodar una película en un restaurante. Warhol aceptó. Alquiló uno y lo primero que pidió a los actores es que se quitaran la ropa.

La fase más comercial, a partir de Chelsea Girls, se fraguó al asociarse con el director de fotografía Paul x, que le dio un toque más profesional a sus filmes.