Hace poco más de dos años que José Ortiz (PSOE) consiguió lo que parecía imposible: desalojar a Pedro Fernández Montes (PP) de la Alcaldía de Torremolinos tras cinco mayorías absolutas. Investido nuevo regidor con el respaldo de Ciudadanos, Costa del Sol Sí Puede e Izquierda Unida, Ortiz timonea la regeneración de la icónica localidad malagueña, destino turístico pionero en España, con el doble reto de sanear las cuentas municipales, que arrastran una deuda cercana a los 200 millones de euros, y modernizar su tejido comercial y su programa cultural y de ocio.
–¿Avanza la legislatura al ritmo que esperaba?
–Para ser franco, me hubiera gustado avanzar más en algunos capítulos, pero nos encontramos con procesos administrativos que se alargan y con una situación económica más complicada de la que pensábamos. Los acuerdos para desbloquear el presupuesto han sido difíciles, pero ya están aprobados y comenzarán a ponerse en marcha grandes proyectos.
–¿Cuáles son sus principales objetivos para 2019?
–Tenemos tres retos fundamentales. Sabemos la carga fiscal que el IBI representa para los ciudadanos y nuestro objetivo es reducirlo este año, pero antes hay que cumplir el plan de ajuste y bajar el plazo medio de pago a proveedores. También queremos inaugurar el bulevar peatonal del centro y que se apruebe el Plan General de Ordenación Urbana, que está muy avanzado. Esperamos dar esa noticia antes de final de año.
–¿Cuánto de alargada es la sombra de Pedro Fernández Montes?
–Es muy alargada, por desgracia. Para que esta ciudad siga modernizándose y haya una regeneración democrática completa hay que eliminar la metástasis que queda de esa etapa.
–¿Recuerda cómo se encontró el despacho de Alcaldía?
–Era un despacho muy oscuro y recargado. Lo primero que hicimos fue despejarlo de adornos y quitar las cortinas para que entrara luz.
Sus retos hasta final de legislatura
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Bulevar peatonal
En el centro urbano, diseñado por Salvador Moreno Peralta y cuyas obras comenzarán en las próximas semanas, supone uno de los grandes objetivos del equipo liderado por Ortiz
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Reducción del IBI
Hasta ahora el gran caballo de batalla del PSOE, que gobierna en minoría, y la bajada del plazo medio de pago a proveedores, uno de los más altos de Andalucía, son compromisos establecidos este año
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Desbloqueo del PGOU,
Ya en su rectafinal, es otro de los retos señalados en rojo en la hoja de ruta del alcalde. El documento activaría, entre otros proyectos, el inicio de las obras del gran parque comercial y de ocio que prevé construir la promotora británica Intu
–¿Qué cambios considera cristalizados estos dos años?
–El cambio más importante es que Torremolinos vuelve ahora a ser una ciudad abierta, desbloqueada. Los ciudadanos saben que estamos en plena transformación y que se ha abierto el acceso a la administración.
–¿Cuál de sus socios de investidura le ha quitado más veces el sueño?
–Va por épocas y áreas. A veces hemos tenido discrepancias con Costa del Sol Sí Puede e Izquierda Unida y, en otras ocasiones, con Ciudadanos. Para eso están las negociaciones, la paciencia y la generosidad.
–Estoy viendo en una placa que es cinturón negro de jiu-jitsu.
–Es honorífico. Me hicieron el regalo en unas jornadas porque se acordaron de que en mi juventud practicaba artes marciales y me quedé muy cerca del cinturón negro.
–Dígame, ¿a qué rival político le haría una llave?
–Prefiero convencerles y aliarme con ellos para sacar adelante proyectos.
–¿Se resiste Margarita del Cid?
–¿Pregunta si se resiste a Pedro Fernández Montes o a mí?
–¿Cómo es su relación con ella?
–Siempre hemos tenido una relación cordial. Hemos alcanzado acuerdos importantes, aunque me hubiera gustado que cerráramos asuntos de interés para la ciudad a más largo plazo. Espero que el PP se regenere. Sé que ella está haciendo todo lo posible para conseguirlo.
–¿Pesa gobernar en minoría?
–Siempre es bueno tener acuerdos de legislatura con equipos más amplios. Me hubiera gustado que participaran en el gobierno otros partidos, pero no ha podido ser.
–¿Teme una moción de censura?
–Tres meses después de llegar a la Alcaldía ya se hablaba de una moción de censura. No temo nada, estamos aquí gracias a la confianza que mostraron los partidos de cambio, que continúan dando signos de querer seguir transformando la ciudad. Siempre hay debates y diferencias, pero hemos llegado a grandes acuerdos en los plenos. El 80 por ciento de las mociones se han aprobado.
–¿Por qué nunca comparece cuando se tratan asuntos espinosos, como las auditorías o el IBI?
–A diferencia de antes, cuando solo había un único protagonista, todos los concejales tienen acción de gobierno y exponen sus asuntos. Soy muy respetuoso con mi equipo.
–¿Cómo valora la gestión anterior?
–Creo que hay dos etapas. En las dos primeras legislaturas y parte de la tercera se llevaron a cabo acciones y cambios interesantes y visibles, pero las dos últimas legislaturas fueron nefastas para el desarrollo y la economía de la ciudad. La mitad del tejido productivo del centro urbano desapareció y se fueron las grandes marcas. La ciudad perdió fuerza, porque los turistas venían únicamente a alojarse y disfrutaban del ocio en otros municipios. La quiebra es tan grande y la imagen y la decadencia de Torremolinos han sido tan desastrosas que se comieron esa primera gestión.
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Padre de tres hijos
Tiene 55 años, es empresario en el sector de la informática y estudia Derecho en la Universidad Camilo José Cela
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Afiliado al PSOE
Desde 1991 forma parte del Partido Socialista y es vocal de la ejecutiva autonómica
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Concejal desde 2007
Fue nombrado portavoz del PSOE en 2011 y lideró la oposición al PP, por entonces con mayoría absoluta
–Haga una autocrítica.
–Me hubiera gustado avanzar en proyectos como la peatonalización del centro y que hubiéramos inaugurado el bulevar este verano.
–¿Qué nota le pondría a su gestión?
–Un aprobado alto, un seis. Aún quedan muchos grandes proyectos y compromisos pendientes de ejecución, y vine aquí para cumplirlos todos.
–¿Le preocupa el protagonismo que está adquiriendo Maribel Tocón, su número dos?
–No solo no me preocupa, sino que la admiro profundamente. Me parece que ha demostrado capacidad, esfuerzo, dedicación e inteligencia, y esos valores son compartidos por otras personas del equipo, aunque quizá con una labor menos visible.
–Ahora que forma parte de la ejecutiva de Susana Díaz, ¿le ha recordado los compromisos pendientes de la Junta en Torremolinos?
–Susana es consciente de que Torremolinos necesita un respaldo de la Junta. El Hospital Marítimo requiere una inversión importante y debe ser un centro de referencia para la Costa del Sol. También hemos planteado una alternativa para los juzgados, que están estudiando.
–Han eliminado la Cena del Pescaíto. No será por falta de invitados...
–No era una buena imagen para la ciudad y tampoco compartimos esa estética, y además es un recorte económico que podemos invertir en promociones más modernas y atractivas.
–¿Cómo es José Ortiz fuera del Ayuntamiento?
–Me queda poco tiempo libre. La política municipal es absorbente. Me he comprometido a dedicar más tiempo a mis hijos, especialmente al pequeño, que tiene catorce años. Es algo que me duele mucho. Entro en el Ayuntamiento a las ocho y media de la mañana y es difícil que llegue a casa antes de las once de la noche. También echo de menos el deporte y me están aconsejando que lo haga porque empieza a hacer daño el colesterol...
–Creo que Fernández Montes juega muy bien al tenis. Podrían retarse a un partido algún día.
–Me consta que Pedro lleva muchos años jugando y tiene buena forma física. Yo no tengo tiempo y he aprendido más tarde que él, pero sería un partido interesante.
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