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Leovigildo López, cuando era alcalde de Cómpeta
El exalcalde de Cómpeta dice que daba las licencias basadas en los informes

El exalcalde de Cómpeta dice que daba las licencias basadas en los informes

Visto para sentencia el juicio por presunto delito urbanístico contra Leovigildo López, otros dos ediles y el que era arquitecto municipal

Agustín Peláez

Sábado, 16 de abril 2016, 00:36

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El exalcalde de Cómpeta entre 1991 y 2007, Leovigildo López Cerezo, se declaró ayer inocente en el juicio celebrado en el Juzgado de lo Penal número 2 de Málaga por un presunto delito urbanístico. En concreto por la concesión de una licencia de obras para una vivienda con porche, chimenea y zona aterrazada con piscina en suelo no urbanizable en el paraje Pago la Mata, en mayo de 2006. Asimismo, aseguró que se otorgó dicha licencia de obras con los informes municipales en regla y sin que nadie advirtiera a la corporación de que podían estar incurriendo en algún tipo de ilegalidad. En este sentido, dijo que si ello se hubiera producido no se habría aprobado.

Así, indicó que si firmó la concesión de la licencia era «porque se decía en los informes que se podía hacer» y aunque, según el fiscal, el permiso se dio a pesar de que la Junta de Andalucía había emitido un dictamen desfavorable sobre el proyecto de actuación de la vivienda por no haberse acreditado la superficie de la finca y no considerarse justificada la necesidad de la vivienda en el medio rural, López manifestó que los informes señalaban que el pleno podía decidir lo que considerara conveniente.

El exalcalde que se encuentra en prisión por otra causa desde enero pasado, señaló que había dado orden a los técnicos municipales de que no se llevara ningún asunto al pleno si no estaba en regla.

Junto al exregidor también se sentaron en el banquillo como acusados el que era arquitecto municipal y dos exediles, los cuales mantuvieron su inocencia, igualmente, y coincidieron en que nadie les advirtió de ilegalidad. Uno de ellos señaló que si votaba a favor es porque cuando iban los asuntos a pleno todo era favorable. El arquitecto, por su parte, que también se declaró inocente, aseguró que había «una indeterminación legal» en los requisitos para justificar la necesidad de una vivienda vinculada a una explotación agrícola.

La que fuera secretaria del Ayuntamiento declaró como testigo y que en aquella época sólo tenía bachiller, dijo que advirtió al pleno de que tenía que tener prudencia en la aprobación de los proyectos de actuación, y que había pedido al arquitecto que se pronunciara de forma concluyente en sus informes. «No decía ni sí ni no, pero el pleno y yo misma entendíamos que era a favor», y que «parecía que estaba incitando a los concejales a que aprobaran el proyecto de actuación», declaró.

La Fiscalía solicita una pena de dos años de prisión para cada uno de los acusados por entender que la licencia era contraria a la normativa vigente, mientras las defensas piden la absolución. Tras la vista oral el caso queda visto para sentencia.

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