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Esperanza Oña, Antonio Sanz, Javier Arenas, Juanma Moreno, Loles López Gabarro y Juan Bueno.
Polémica en el PP andaluz por las incompatibilidades de altos cargos

Polémica en el PP andaluz por las incompatibilidades de altos cargos

La pretensión de Juanma Moreno de ir a un congreso tranquilo choca con el nuevo estatuto del partido cuestionando la continuidad de algunos presidentes provinciales

Maria Dolores Tortosa

Domingo, 19 de febrero 2017, 00:35

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Juanma Moreno tiene interiorizado que va a ser el primer presidente de la Junta de Andalucía de su partido y con esa única meta trabaja para que el 15 congreso del PP andaluz de los días 17 al 19 en Málaga, en el que se presenta a la reelección, transcurra en paz entre los distintos bandos políticos de su partido en Andalucía. Quiere que de este congreso salga un partido «fuerte y engrasado» para la gran batalla que le espera de aquí a los comicios autonómicos en dos años como mucho y nadie se distraiga con batallitas provinciales. Pero este objetivo puede verse enturbiado por una polémica de última hora sobre las incompatibilidades reflejadas en el documento final de los estatutos del partido aprobados el pasado fin de semana.

El artículo 10 de los citados estatutos sobre el régimen de incompatibilidades señala textualmente que los «presidentes y secretarios generales provinciales e insulares del partido sólo son compatibles con cargos de representación institucional en corporaciones locales y provinciales, en parlamentos autonómicos y en el Senado».

Según esto, tres altos cargos del PP, el delegado del Gobierno en Andalucía, Antonio Sanz, el secretario de Estado de Seguridad, José Antonio Nieto, y el secretario de Estado de Hacienda, Enrique Fernández de Moya, no podrían presentarse a la reelección como presidentes provinciales de Cádiz, Córdoba y Jaén, respectivamente.

A los del resto de las provincias no les concierne porque los cargos institucionales que desempeñan son como presidentes de diputaciones, como los de Málaga, Elías Bendodo, y Almería, Gabriel Amat; diputado en el Parlamento andaluz, como el de Huelva, Manuel Andrés González; y senador, como el de Granada, Sebastián Pérez.

Otro apartado del mismo artículo dice que no podrá desempeñarse «más de un cargo territorial de presidente o secretario general del partido, ni acumularse a este más de un cargo de representación institucional, local autonómica o nacional». Este apartado podría entrar en contradicción con el primero mencionado al admitir un cargo institucional nacional con el orgánico territorial. También deja dudas sobre la incompatibilidad de otros cargos, como el caso de Elías Bendodo, que además de presidente del PP de Málaga es portavoz de la dirección regional del PP.

Este artículo pasó desapercibido en la polémica votación de la ponencia política en el congreso de Madrid, cuando se debatía en realidad la compatibilidad de Dolores de Cospedal como secretaria general, ministra de Defensa y presidenta del PP de Castilla La Mancha. Una vez que la votación dio carta libre a Cospedal para seguir con todos estos puestos, todos los demás cargos institucionales con responsabilidades orgánicas pensaron que entraban en el mismo paquete. De hecho Fernández de Moya anunció su candidatura a la presidencia del PP de Jaén este viernes y también se conoce que Antonio Sanz quería continuar al frente del PP de Cádiz.

El texto completo de la ponencia aprobada llegó a las sedes de los partidos la noche del viernes y ayer trascendió la polémica generada por la interpretación distinta que unos y otros hacen del articulado. Ante el revuelo, fuentes del PP andaluz indicaron a este periódico de que Juanma Moreno no está por la labor de vetar a nadie. Los estatutos prevén excepciones que deberán ser aprobadas por la dirección nacional. En estos casos suele consultarse a las direcciones territoriales y es aquí donde Moreno deberá intervenir para avalar o no la excepción.

Moreno se había mostrado contrario a la pretensión de Cospedal de compatibilizar su cargo de ministra y secretaria general y de hecho no votó en la citada ponencia política. El líder del PP andaluz defiende la incompatibilidad de cargos, aunque él mismo desempeña tres. Varias veces ha expresado que su único deseo es que los cargos del partido le dediquen todo el tiempo a su labor, por lo que no es lo mismo un cargo institucional con su labor fuera de Andalucía que en esta. Sería el caso de Antonio Sanz, que es delegado del Gobierno en Andalucía con sede en Sevilla y presidente del PP de Cádiz, a una hora de distancia. Moreno respaldará la continuidad de Sanz al frente del PP de Cádiz aunque tuviera que hacer una excepción según los estatutos, apuntan varias fuentes.

No habrá vetos

Tampoco vetará a Nieto y Fernández de Moya. Moreno quiere un congreso andaluz tranquilo y en pro de ello había empezado a negociar con los presidentes provinciales aludidos un entendimiento antes de conocerse el documento final de la ponencia política. No les movería la silla ni impulsaría candidatos alternativos a cambio de consenso en la elección de sus secretarios generales, quienes en realidad son quienes trabajarán luego en el día a día de la organización y cooperación del partido. El acuerdo es necesario puesto que ninguno son de su círculo propio en el PP andaluz. Sanz es un hombre de Arenas y a Nieto y Moya se les considera afines a Cospedal.

El presidente del PP andaluz había trabajado en las últimas semanas para que así fuera. El ambiente distendido de la junta directiva del martes pasado en la que anunció su candidatura y la ovación recibida así lo hace prever. El primer fruto de esta paz se vio este viernes por la mañana, cuando afiliados de las NNGG de Cádiz le entregaron de forma simbólica los 90 avales necesarios para ser candidato en presencia de Sanz. Otros arenistas, como Ángeles Muñoz, han protagonizado también recogida de avales. Estaba previsto que se haga en todas las provincias como forma de hacer visible el apoyo a Moreno sin fisuras.

Moreno incluso ha recompuesto su relación con Javier Arenas, al que ya no ve como el jarrón chino que le saca de la foto, sino un aliado y contrapeso en Andalucía del poder ascendiente de Cospedal, con la que no tiene sintonía.

Sobre todo Moreno quiere salir ungido por las bases en el primer proceso en el que estas participan para la elección del presidente en primera vuelta. Con ello sacará pecho ante Susana Díaz en la misma fecha que esta anuncie su candidatura a las primarias del PSOE, aunque en la contienda por la Junta ya no vuelva a ser su rival.

Primarias y candidato único

Por primera vez, en aplicación de los mismos estatutos de las polémicas incompatibilidades, los 163.000 afiliados del PP en Andalucía votarán al candidato a presidente del partido. Sus votos no serán decisivos, porque serán los compromisarios los que dictaminen en última instancia en el congreso la elección del presidente y los órganos de dirección. Pero le otorgan un plus importante y sobre todo le pueden servir de garantía si el apoyo es masivo para aflojar la presión de los barones territoriales a la hora de diseñar su grupo de dirección. Moreno, como Rajoy, quiere seguir confiando en su actual equipo, con Dolores López Gabarro como número dos.

Algo no ha cambiado en la estrategia de Juanma Moreno desde que asumió la presidencia del PP andaluz señalado por Rajoy en marzo de 2014: Su absoluto convencimiento de que su única misión es ganar las elecciones. Rajoy le hizo esta encomienda de lograr el Gobierno en Andalucía en el congrso de Granada, en el que se estrenó como presidente regional del PP-A, y aún se la sigue recordando cada vez que viene para escenificar su confianza en el político malagueño.

Una confianza sin flaquezas que hace prever que Moreno no tendrá ningún rival para renovar la presidencia del PP andaluz en el congreso de Málaga. El plazo para presentar candidaturas termina este martes día 21 y solo hacen falta 90 avales, pese a lo cual en el entorno de Moreno no se espera ni siquiera un espontáneo con ganas de su minuto de gloria, al estilo del alcalde de Jun, José Antonio Rodríguez, contra Susana Díaz en 2013; o del diputado andaluz Juan Ignacio Moreno Yagüe contra Pablo Iglesias en Vistalegre 2.

Moreno retó a los afiliados a hacerlo e incluso a promover la discrepancia cuando presentó su candidatura este martes ante su junta directiva. En su entorno aseguran que tampoco se va a forzar un paripé con candidatos de paja para aparentar que gana las pseudo primarias con las que se estrena el 15 congreso del PP andaluz.

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