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sucesos

Un policía y un guardia civil, fuera de servicio, salvan a dos personas en Benalmádena y Fuengirola

Los agentes rescataron de morir ahogados a un bañista y a una mujer que apareció flotando en la desembocadura del río del Castillo Sohail

AGENCIAS

Viernes, 6 de septiembre 2013, 15:44

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Un hombre de 52 años ha sido rescatado de morir ahogado en una playa con fuerte oleaje de Benalmádena por un agente de la Policía Nacional fuera de servicio.

La víctima se hallaba en una zona rocosa luchando por mantenerse a flote debido a las fuertes olas que había ese día, motivo por el cual la bandera amarilla ondeaba la playa el pasado 30 de agosto alrededor de las 16.00 horas, según ha informado un comunicado del Ministerio del Interior.

El agente divisó que el bañista tenía dificultades para salir del agua por lo que se adentró en el mar para ayudarle y pudo rescatarlo, ya que se encontraba "semiincosciente" debido a los impactos contra los salientes rocosos.

Una vez en la orilla, la víctima se quejaba de un dolor en las piernas y en la espalda por lo que el policía le inmovilizó a la espera de la asistencia sanitaria.

Cuando llegó la ambulancia lo trasladaron al Hospital de Benalmádena en donde se comprobó que tenía una fractura de la apófisis lateral izquierda en algunas vértebras y el agente también precisó asistencia médica por dolores en su hombro derecho.

Rescate en Fuengirola

Por otro lado, en Fuengirola una mujer también ha sido rescatada de morir ahogada en la desembocadura del río, a la altura del castillo Sohail. En esta ocasión, un agente de la Guardia Civil, que estaba fuera de servicio, se encontraba en la zona junto a su familia cuando se percató de que había un cuerpo flotando boca abajo dentro del agua. Ante esta situación, el Guardia Civil se lanzó rápidamente al agua hacia el cuerpo y una vez llegó a él consiguió sacarlo con la ayuda de un familiar suyo. En ese momento comprobó que se trataba de una mujer, de avanzada edad, y que se encontraba sin pulso alguno.

De inmediato, el agente comenzó a practicar a la mujer un masaje cardiaco de reanimación cardio-pulmonar hasta que la víctima comenzó a toser y a expulsar gran cantidad de agua y espuma por la boca y la nariz, momento éste en que se personó el socorrista de la playa, quien colaboró en el masaje cardiaco y ayudó a colocar a la mujer en posición de seguridad a la espera de la llegada de asistencia médica.

Minutos más tarde se personaron en el lugar dos ambulancias y fue el personal médico, junto con el socorrista, quien se hizo cargo de la situación.

La persona auxiliada, que iba acompañada por miembros de un centro de discapacitados psíquicos con domicilio social en la localidad de Coín, fue trasladada y hospitalizada en el Centro Médico Costa del Sol de Marbella.

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