Ojo con tatuarse en la playa: los riesgos de la henna 'express'

Desde la Unión de Consumidores explican que se trata de una henna negra, «un tinte natural al que le añaden otras sustancias, de color marrón, que aceleran el proceso de fijado y color en la piel, ya que la henna verdosa tarda más de cuatro horas en conseguir esos resultados». Los colorantes añadidos -continúa criticando la organización- «pueden provocar reacciones alérgicas que van desde el picor a las cicatrices, pasando por el enrojecimiento, manchas, ampollas o la decoloración permanente de la piel». «Las personas pueden volverse permanentemente sensibilizadas a estas sustancias, de manera que no podrían usar tintes o trabajar en peluquerías de por vida», añaden.

Ante estas consecuencias, la Unión de Consumidores de Andalucía recomienda no hacerse tatuajes de este tipo en la playa o en sitios que no reúnen las condiciones higiénico-sanitarias pertinentes. Además, la UCA ha instado a la Secretaría General de Consumo, de la Consejería de Administración Local y Relaciones Institucionales «a llevar a cabo las necesarias inspecciones, controles y sanciones pertinentes, a través de una programación de inspección más exhaustiva que debería abarcar tanto los puntos itinerantes o móviles donde se realizan estos tatuajes, como la relativa a los piercings». Estas actividades son también frecuentes -además de en puntos turísticos del litoral- en macrofiestas, comercios de moda, bazares y hasta furgonetas en puntos de concentración juvenil, asegura la UCA.