Un empate entre buenos expedientes obliga al Ayuntamiento a sortear dos premios entre 34 alumnos

Han terminado el curso con unas notas insuperables y ayer tuvieron su recompensa en forma de reconocimiento público, auque solo dos se llevaron el dinero. Los 34 alumnos con una calificación media de 10 que se han presentado este año a los premios de educación Ciudad de Málaga han obligado al Ayuntamiento a sortear la dotación económica, de 633 euros para ESO y de 1.266 en la categoría de Bachillerato. Finalmente los ganadores fueron Antonio Méndez Parrado, del colegio privado El Romeral; y Manuel Cabacino Ibáñez, del centro concertado Europa, aunque ambos se esforzaron ayer en repetir que el premio «es de todos» durante la gala de entrega de diplomas, celebrada en el Teatro Echegaray.

En esta edición han participado 69 alumnos procedentes de 33 centros escolares (14 IES, 17 colegios concertados y dos privados). En la categoría de ESO tres estudiantes resultaron empatados con una nota media de diez, mientras que en Bachillerato fueron 31 los que llegaron al sorteo. Aunque solo dos se llevaron el dinero a casa, todos recibieron un diploma acreditativo, que entregó el alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, que estuvo acompañado por el concejal de Educación, Damián Caneda, y por la vicerrectora de Extensión Universitaria de la UMA, María Isabel Calero. Los tres destacaron la recompensa que suponen estos premios para el esfuerzo de los jóvenes y les animaron a seguir en esa línea. El regidor habló de la necesidad de "dar pasos adelante en materia educativa en nuestro país" y dijo que los alumnos que ayer estaban en el teatro representan a otros miles de malagueños. Calero, por su parte, les aconsejó que elijan sus estudios "por vocación" y que nunca pierdan la curiosidad.

Los dos alumnos que recibieron el premio económico no podían ocultar su enorme satisfacción. Manuel Cabacino, de 17 años, acaba de terminar segundo de Bachillerato en el colegio Europa y tras sacar un 13,025 en Selectividad quiere estudiar Medicina en la UMA y especializarse en neurología, "un campo en el que hay muchas cosas por descubrir". Para él, el premio que recibió ayer supone "una gran recompensa a tantos años de esfuerzo".

Respecto a los recortes en educación y a los mayores requisitos para obtener una beca, este malagueño afirmó que "todo el mundo tiene derecho a estudiar y no tiene por qué perder la ayuda económica por tener un mal año".

Para Antonio Méndez, de 15 años, haber sido reconocido como uno de los alumnos con mejor expediente de Málaga es "todo un privilegio". Este joven quiere estudiar Matemáticas porque "es algo en lo que tú tienes que razonar", y sobre la reforma educativa, aunque dijo no entender de política, señaló que "todo lo que ayude a subir el nivel, si se consigue, bienvenido sea".