Borrar
Pedro Serra, ayer en la Casa Natal. / J. A. PORTILLO
Pedro Serra: «Los empresarios hacen dinero, a la mayoría no les interesa el arte»
EMPRESARIO Y COLECCIONISTA

Pedro Serra: «Los empresarios hacen dinero, a la mayoría no les interesa el arte»

El mecenas mallorquín anuncia que comprará una «pieza única» de Picasso para «regalársela» a la Casa Natal

A. J. L.

Jueves, 26 de noviembre 2009, 02:40

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

El nombre de Pedro Serra va unido a la historia de la Casa Natal. Un préstamo suyo sirvió hace más de 20 años para inaugurar la sede de la fundación y otra cesión como aquella (una donación de 25 cerámicas del genio) se exhibe ahora en sus salas. El mecenas aprovechó ayer su visita a la ciudad para anunciar la compra de otra cerámica picassiana, una «pieza única» para «regalársela» a la institución.

¿Qué debe tener una obra para comprarla?

Es como un flechazo. ¿Qué hace que un hombre y una mujer que no se han visto en su vida se miren y sientan atracción? Es lo mismo. Recuerdo que en una ocasión estaba en París con el empresario José Hidalgo en una muestra de Miró que terminaba con tres grandes obras: 'Azul I', 'Azul II' y 'Azul III'. José, que es un genio en cuestión de negocios pero en arte no, me dijo '¡Este, este quiero comprarlo!'. Yo le aclaré que no se vendían y, al preguntarme cuánto podría costar, le respondí que unos cuatro millones de dólares. Y me dijo: 'Hombre, yo con cuatro millones de dólares me compro un avión' (ríe).

¿Se ha sentido incomprendido entre los empresarios por profesar ese interés por el coleccionismo?

En un 999 por 1.000, sí y ese uno no sé quién es. Los empresarios hacen dinero, a la mayoría no les interesa el arte. No conozco ningún empresario mallorquín que profese la más mínima pasión por el arte y algunos del resto del mundo dicen que lo que hacía Miró lo hace su niño pequeño.

¿A qué achaca esa falta de interés?

Con eso se nace o no se nace.

¿Y cómo empezó a coleccionar obras de Picasso?

La fascinación por Picasso me llegó de una forma curiosa. Todos los años llegaba a Palma una marchante de arte californiana para pasar allí las vacaciones. Un año me dijo que lo había vendido todo menos una cerámica de Picasso y que le daba pereza volverse con ella porque tenía miedo de que se le rompiera. Me dijo que me la vendía por lo que le había costado. Pedía 500.000 pesetas y la compré. Después fui una subasta, vi los precios y cómo se vendían y empecé a comprar, comprar, comprar... Y así hasta 140 cerámicas.

¿Tiene 140 cerámicas de Picasso?

Más o menos, 142 ó 138, no lo sé. De vez en cuando regalo alguna.

Directo al corazón

¿Y qué le aportan esas obras como coleccionista?

Con esas obras pienso que todo sale de la tierra. Cómo de la tierra, del fango, sale una maravilla de obra de arte. La creatividad de un artista me llega al corazón.

En su extraordinaria colección, ¿tiene alguna espina clavada?

(Entre risas) Tengo una espina clavada que ya no me podré quitar, porque nunca podré conseguir una pieza de Brancusi. La última que se vendió en subasta pública era 'El beso', por la que se pagaron cuatro o cinco mil millones de pesetas hace muchos años. Es decir, que no se puede conseguir un 'brancusi'.

¿Y hay algún autor que le gustaría incorporar?

Me gustaría tener algo de Rothko, un buen 'bacon', las constelaciones de Miró... y un 'pollock'.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios