Las nuevas manos del artista

La utilización de la piedra natural se remonta a los albores del tiempo, desde su uso más rudimentario para la elaboración de brazaletes o utensilios cotidianos a construcciones más complejas como monumentos funerarios. Pero los tiempos han cambiado y las nuevas tecnologías han modernizado este sector, que aunque tradicional, es capaz de conjugar lo nuevo sin perder el encanto del ayer. Conscientes de esta evolución, el Centro Tecnológico Andaluz de la Piedra han desarrollado un software de digitalización con el que llevan a cabo la reproducción de réplicas de monumentos o esculturas. Todo gracias a un brazo robótico que va tallando al mílímetro la imagen que aparece en la pantalla del ordenador.

Se trata de un sistema que soluciona las necesidades del artista, pues reduce los costes de fabricación, disminuye la cantidad de residuos y ahorra parte del tiempo que normalmente se invierte en este tipo de trabajos.

Nuevos hábitos

De esta manera, el escultor sólo tiene que diseñar una maqueta de la pieza a una escala pequeña. El programa la escanea para que se pueda ver en la pantalla del ordenador, y después, un robot con conexión a este software va tallando en la piedra, con todo lujo de detalles, todos y cada uno de los rasgos o facciones de la escultura.

Crumar es una de las empresas almerienses que utilizan ya esta tecnología. Según su director comercial, Lorenzo Jiménez, hay muchos clientes que sólo piden la digitalización de la obra para tenerla en CD, como «es el caso de algunas cofradías que encargan el escaneo de sus vírgenes o santos para que, en caso de que se rompan o deterioren, poderlas reproducir o restaurar y dejarlas tal y como estaban en un principio», comenta el directivo. La posibilidad de hacer réplicas a menor o mayor escala es otra de las ventajas de este novedoso proceso. Se puede pensar que con este sistema el artista deja de tener el control sobre la obra, cediéndoselo a la máquina. Pero nada más lejos de la realidad, ya que esta tecnología sólo sirve para reproducir la creación del escultor, y por si fuese poco, el acabado final siempre se deja a manos del creador para que perfile y de los últimos retoques a su obra.

Con este programa informático se pueden realizar réplicas de una pieza original gracias a la tecnología más avanzada en control numérico y escaner láser. Según Jiménez, una de las ventajas que tiene utilizar este sistema es la garantía del resultado final. Y es que la pieza queda idéntica a la original, sin que nadie la toque ni manipule el proceso de copiado.

Algunos ejemplos de los trabajos desarrollados mediante este sistema, son la digitalización de la Pila Bautismal del Padre Pío, una pieza de origen neolítico que se hizo para el Museo de Antequera o la reproducción en piedra de la 'granada', fruto e insignia de la ciudad que lleva su mismo nombre. «La granada original de la cual se tomó la imagen estaba en el ayuntamiento de la capital, y actualmente forma parte de la decoración de una de las rotondas de esta ciudad», comenta Jiménez.