Moléculas con doble cara

Se sabe desde hace mucho tiempo que ciertos compuestos naturales denominados aminas, que provienen de los aminoácidos, tienen actividades biológicas muy diversas. Las aminas se sintetizan en los organismos vivos durante los procesos metabólicos normales, y aparecen en el organismo como resultado de la ingesta de algunos alimentos, o son sintetizadas por las propias células. Sus características y funciones biológicas son muy diversas, ya que pueden tener efectos tanto beneficiosos como perjudiciales para la salud.

Un grupo de investigación de la Universidad de Málaga, encabezado por la profesora Francisca María Sánchez Jiménez, estudia en concreto dos tipos de aminas: las histaminas y las poliaminas. Así, mientras que estas últimas parece que son esenciales para el crecimiento y la proliferación celular -y por tanto, favorecen el crecimiento tumoral-, las primeras se relacionan con la comunicación intercelular y están implicadas en neurotransmisión y respuesta inmune. Una alteración metabólica y una ingesta deficiente o excesiva de las mismas puede tener serias consecuencias para la salud. Entre las enfermedades relacionadas con estos compuestos hay diversos trastornos de tipo mental, procesos inflamatorios y alérgicos, y la progresión tumoral.

Dado que las aminas están implicadas en enfermedades que afectan prácticamete al cien por cien de la población en algún momento de su vida, y puesto que constituye una cuestión de seguridad alimentaria y metabólica, este grupo de investigadores malagueños, incentivados por la Consejería de Innovación Ciencia y Empresa con 75.000 euros, se han propuesto estudiar estos compuestos para ver cómo funcionan y qué tienen que ver en la aparición de estas dolencias.

Integración de ciencias

«El objetivo es conocer la base molecular de enfermedades raras de origen genético, inflamatorias y tumores, para después desarrollar nuevos fármacos», comenta la profesora Sánchez. Se trata de una investigación que utiliza las nuevas tecnologías, la informática y las matemáticas como herramientas fundamentales. Así, los ordenadores son una pieza imprescindible para clasificar toda la información que obtienen de los experimentos y las fórmulas matemáticas ayudan a interpretar esos datos anticipandose incluso a lo que puede ocurrir.

El proyecto generará una plataforma 'on line' bilingüe (español-inglés) dividida en varias zonas de trabajo, donde se integrarán los diversos recursos generados. Igualmente uno de sus objetivos principales es formar a nuevos expertos en bioinformática, una de las especializaciones para las que se ofertan más puestos de trabajo dado que el binomio Genómica-Bioinformática acelera enormemente el análisis de información sobre el funcionamiento de sistemas biológicos complejos. Los investigadores esperan ahora despertar el interés del sector farmacéutico.